Un factor que en ocasiones se nos escapa cuando estamos gestionando diferentes dominios es evitar penalizaciones de posicionamiento del mismo. Por ejemplo, este efecto se produce cuando podemos acceder a él tanto escribiendo las tres W’s como tecleando directamente el nombre del dominio. Aparentemente no se trata de una cuestión extremadamente grave, pero puede provocarnos ciertos problemas de cara a posicionamiento en buscadores cómo Google.
Entendemos que un dominio que presenta esta característica puede incidir en lo que se conoce como contenidos duplicados y esto, a su vez, repercutir negativamente sobre el posicionamiento de la web en los principales buscadores que luchan contra este método, esto incumple determinadas normativas de los buscadores y que puede derivar en penalizaciones.
Para evitar estas sanciones, debemos comprobar que todos nuestros dominios funcionan a través de una única dirección (con o sin WWW). Si no es así, desde el panel de control del dominio debemos configurar el sistema de redirección para que únicamente muestre una de ellas y aplicar el que más nos convenga en función de las características técnicas del sitio.